A mi nieta de 12 años le gusta bromear conmigo. Cuando me describe me dice, “mi abuela es paz y amor, todo está bien, respira”. Si ella supiera cómo yo era antes. El coraje era mi emoción predominante. Es más, tuve que trabajar bastante conmigo para ver si estaba triste, ansiosa, o qué, porque con cualquier emoción que no fuera paz, yo reaccionaba con coraje, y pobre del que me hubiera causado la emoción, pues tenía la habilidad de decir lo que más le ofendiera.
Un día decidí que yo no tenía el derecho de ofender a nadie, no importaba lo que hubiera hecho o dejado de hacer. Me di a la tarea de cambiar. En esos días había aprendido lo de la respiración rítmica. Me propuse retirarme a otro lugar cuando sentía coraje y comenzar a respirar rítmica y profundamente hasta que me sintiera tranquila. Luego de un tiempo, funcionó, no más ofender a otros
La respiración nos conecta con toda la creación. Si se fijan, lo primero que hacemos al nacer, es respirar y lo último al morir, es dejar de respirar. En el medio, nos pasamos la vida respirando a medias, con una respiración bastante llana.
Aquí indico una de las formas de respirar profundamente y con conciencia. Si utilizas esto cada vez que no estás centrado verás cómo rápidamente vuelves a centrarte.
Para relajarte, la respiración rítmica es muy importante. Para lograrla siéntate cómodo con la espalda recta y haz lo siguiente:
- Fíjate en los latidos de tu corazón.
- Llénate los pulmones lo más que puedas contando 6 latidos.
- Aguanta la respiración por 3 latidos.
- Exhala contando 6 latidos.
- Espera 3 latidos.
- Comienza de nuevo con el mismo ritmo.
- El patrón importante es aguantar la respiración por cierto número de latidos e inhalar y exhalar el doble de latidos. EJ. 2 – 4 – 2 – 4; 3 – 6 – 3 – 6; 4 – 8 – 4 – 8
- No importa cual patrón escojas. El que sea cómodo para ti. Practícalo hasta que se convierta en hábito.
Cuando comiences a lograr más paz en tu vida, ponme un cometario aquí en el blog. Me interesaría mucho saber cómo vas despertando al amor que eres a través de mis experiencias.