¿Nunca has pensado que no tienes tiempo para hacer todo lo que tienes que hacer? ¿Quisieras que el día tuviera más de 24 horas?
Si deseas lograr mayor efectividad en la vida, es indispensable tener una forma adecuada de manejar los proyectos, las prioridades, los itinerarios y las interrupciones.
Hoy en día existen dos cosa que todos utilizamos en nuestros celulares: el calendario y la alarma. Lo importante es aprender a úsalos adecuadamente utilizando bien el manejo del tiempo.
Manejo de tiempo es el arte de invertir bien y sabiamente tus horas preciosas en forma sistemática y de acuerdo a tus propósitos. Si quieres saber en qué inviertes tu tiempo has el siguiente ejercicio:
- Anota en que inviertes tu tiempo, incluyendo el tiempo que te toma cada cosa.
- Haz esto durante una semana.
Este ejercicio te ayudará a:
- Crear consciencia de cuan eficientemente o ineficientemente utilizas tu horas, y;
- Te ayudará a desarrollar la habilidad de utilizar bien el tiempo.
- Además, te darás cuenta de lo malos hábitos que puedes tener en tu manejo del tiempo.
- Y te ayudará a planificar mejor el mismo.
Una vez tienes tu lista, comienza a preguntarte si lo que haces es o no productivo. Recuerda que una cosa es estar ocupado y otra ser efectivo. A veces estas ocupado porque no has planificado bien el tiempo.
- Una de las cosas que más te toman tiempo es el no saber decir que no cuando se te pide algo.
- Otra, es creer que cada vez que suena el teléfono tienes que contestarlo.
Identifica cuáles son las que a ti te hacen perder más el tiempo para que puedas estar alerta cuando suceden.
Para lograr esto puedes hacer el siguiente ejercicio.
- Haz una lista de los patrones de comportamiento y hábitos que no te permiten hacer las cosas a tiempo.
- Evalúa la lista y decide cuáles se pueden corregir o eliminar.
- Cada vez que vayas a hacer algo pregúntate si es necesario hacerlo así o si se puede simplificar.
Una vez que estés clara en cuanto a tus hábitos:
- Haz una lista de tus prioridades para cada día de la semana, enumerándola en orden de prioridad.
- Analiza el tiempo que le vas a dedicar a cada una y ponla en el calendario.
- Pon una alarma para cada hora que vayas a comenzar una tarea nueva.
- Una vez suena la alarma, comienza lo próximo en la lista.
- Delega las cosas que puedes delegar.
Con el tiempo vas modificando tu lista y tus horarios según sea necesario. Verás cómo tu vida se hace mucho más productiva. Te deseo éxito.